A pesar de ser una herramienta jurídica municipal, los PGOUs cuentan con numerosos condicionantes que provienen de administraciones supra-municipales y que deben integrar.
Así, el PGOU de Pasaia debe incorporar legislación sectorial, así como normas de aplicación directa (estándares urbanísticos, por ejemplo) que provienen del Estado y de Gobierno Vasco, como por ejemplo la relativa a: costas, aguas, carreteras, suelos contaminados, patrimonio o telecomunicaciones. Concretamente en materia de vivienda, Gobierno Vasco regula mediante las Directrices de Ordenación Territorial (DOT) el número de nuevas viviendas que se pueden planificar en el PGOU.
Además, integra determinadas materias transversales, como la medioambiental, la sostenibilidad y el cambio climático, la perspectiva inclusiva, el impacto lingüístico, la salud, el impacto acústico…
Por otro lado, el proceso participativo en esta fase del PGOU de Pasaia tiene como objetivo recoger las aportaciones de la mayor cantidad y diversidad de personas, para enriquecer el nuevo plan contrastando y complementando sus contenidos de información urbanística, sin que los resultados sean vinculantes.
Por último, cabe mencionar el factor socioeconómico necesario para que lo previsto en el PGOU se pueda llevar a cabo. Por ejemplo, el PGOU puede prever nuevas viviendas o nuevos espacios para actividades económicas y, sin embargo, cabe la posibilidad de que éstos no se desarrollen en el plazo de vigencia del plan. En ambos casos, debido a la coyuntura económica y otros factores ajenos al plan.